domingo, octubre 23, 2005

Lo que nos enseña la “facha”

Siempre me he quejado de la capacidad que tenemos de estereotipar a la gente —incluyéndome—. Ésta manía ya tan propia del Ecuador y más en sus pueblos o ciudades pequeñas (a veces no se cuál es la diferencia entre la una y la otra) ha generado más de una oportunidad de darme cuenta las actitudes de las personas frente a una “facha” o modo de vestir específico.
Mi trabajo es divertido por ello, cada día junto con los colegas nos enfrentamos al “juego del estereotipo”, el cambio constante de actividad hace que un día sea totalmente diferente al otro, implicando por ello el cambio de vestuario.
De vez en cuando se pueden hacer apuestas como ésta:
—Con la facha en la que te hallas te apuesto el almuerzo de hoy a que en la tienda te confunden con ladrón—
Obviamente a veces se gana y otras se pierde, pero con tanta apuesta y tantos almuerzos gratis he logrado hacer una lista de los estereotipos de acuerdo a mis fachas de la siguiente manera:

Mecánico (anteayer)
Soldador (hoy)
Albañil (más veces de las que ustedes creen)
Arquitecto (pocas veces pero el número ira en aumento con el paso del tiempo)
Electrisista (muy a menudo)
Ingeniero (casi nunca)
Fotógrafo (cuando hay pilas en la cámara)
Huevonf (solamente cuando me pongo terno)
Aniñado (en los cumpleaños)
Abogado en viernes (en las fiestas formales)
Vago de esquina (los días de oficina)
Pulgoso (los domingos en casa)
Borracho y Drogadicto ( con las amigas ñoñas de las tías)
Dos veces drogadicto ( con las malas lenguas )
Ecologista ( en la farra )
Ladrón ( los días de pulgoso pero en lugar de ir caminando, sentado en una esquina)
Carpintero (más veces de las que ustedes creen)
Chofer ( Demasiadas para mi gusto)
Señor ( una vez en un restaurante aniñado)
Piloto de carreras ( una vez que me robé un traje de piloto de un amigo)
Sastre ( Cuando compro hilos y sierres )
Vendedor ( De algo hay que comer ¿no?)
Desocupado ( Cuando me encuentra mi madre jugando con los perros)
Paseador de perros ( sin palabras)
Jardinero (los domingos cuando me azotan hasta que corte el césped)

Y la lista continúa en un largo etcétera… Lo más chistoso del caso es que nunca me han llamado por mi profesión—casi profesión realmente— cosa que no me molesta en lo absoluto. Pero lo que si me molesta es la actitud de las personas (nobles, pseudo nice, oligarcas, fifis, finas, billeteadas o como las quieran calificar ustedes) hacia las profesiones menores, como lo son la cerrajería, la mecánica, entre otras.
Nadie tiene derecho a tratar diferente a las personas por el simple hecho de estar con un overol, o con un casco, con una llave allen en las manos, sucio de grasa. De esto me he dado cuenta porque he convivido con gente que enuncié arriba.
Detesto que el común de las personas trate diferente a alguien porque lleva otro tipo de ropa o esta un poco sucio… o peor aún que piensen que su trabajo no vale nada.

Deberían saber que son esas las personas que mueven al mundo, esas son las personas que aún conservan la alegría por el trabajo, los que trabajan entre bromas, los que me enseñaron a pegarme un pan con cola a media mañana, el guineo con pan, chaulafán con cuchara sentado en una esquina, los que me enseñaron a tomar un taladro entre las manos, a pintar paredes, a templar cables, a cortar telas, a tomar el martillo como se debe, a sacar la punta del lápiz con el esmeril, a preparar arcilla. Me enorgullece que me confundan con uno de ellos, y me entristece que los traten de menos…Y aunque a veces digan cosas como:

—Este man paso en la universidad 5 años y no aprendió a soldar— o
—¡Que gil este flaco que no sabe como nivelar un mueble sin usar un martillo!… o peor aún cuando:
—Deje no más flaquito, que usted no de avanzar a cargar esto porque está pesado y usted es aniñado…
— Oiga flaquito ¿Cuándo se va a comprar herramientas de varón?

Se que ellos no me estan despreciando, me han aceptado en su círculo y me estan invitando a aprender entre bromas y con su equipo de trabajo…

¡Es por ello que muchas gracias colegas y “colegas”!
¡Suerte! Espero poder volver a trabajar con ustedes de nuevo… Y creo que lo haremos.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

señor... mis felictaciones, no habia keido lago tan "nuestro" desde hace mucho tiempo...

un abrazo desde el manso guayas

Anónimo dijo...

De alguna forma creo que todos nos disfrazamos cuando nos vestimos. Hoy por ejemplo, yo viene disfrazado de formal, harto un poco de estar de maestro de obra.

Posiblemente el mejor post que te has mandado panita, monumental,me sentí directamente aludido, pero "a lo bien pues". Esta vez la hiciste de lujo Pastv.

Pastv dijo...

Muchas gracias por los comentarios...
Espero que mucha más gentte como ustedes lo lea y con ello contribuiré desde aqui a que la situacion "estereotipal" mejore...
Gracias de nuevo.

Anónimo dijo...

oye pastvecito.. no quieres escribirme a mi direccion de paulette: paulette.gye@gmail.com¿?? es que necesito hacerte una consulta urgenteeeee pero urgenteee y no hay mail de contacto en tu blog.. please please! , lo mismo hice con el cuenta cuentos pero pues los capitalinos parecen no querer contestarme. un abrazo

Anónimo dijo...

de ley... sin ellos no seriamos nada! y la verdad, nunca me he sentido más emocionada comiendo mi pan con cola como la primera vez que lo hice sentada sobre un bloque en medio de la construcción con un grupo bien bacán de albañiles!!

buena pastv!

Anónimo dijo...

Siempre he sido... he sido... qué te diré... entre ratero y artista... entre hippie socialista...
Mi facha la conoces tú... y para el resto del mundo: me visto con ropa que no me pique, con zapatos que no me incomoden, con pantalones que dejen libertad para correr, saltar y agacharme...
Toda mi ropa es flooojaaaasa... menos mi ropa interior... no me gusta dejar que estén libres o que se bamboleeen al son de mi humanidad...jajajajaja

demasiada información?

pues ahora te aguantas...

un saludo pastv...
suerte en argentina y espero posts que tengan que ver con la corriente argentinística ecuatoriana... y sus intimidades psicosexuales...